Todo empezó en 2013. Tras una decena de trabajos autoeditados, Will Toledo, alma máter de Car Seat Headrest, dejó en el baúl de promesas a olvidar un disco que ha vuelto a regrabar en su totalidad. Hablamos de Twin Fantasy, duodécimo álbum de este chico, tercero para Matador Records.

My boy comienza con tintes emo escuálidos y lacrimales, para después despegar hacia la distorsión y energía, una fórmula trilladada pero que según cómo se haga puede ser deliciosa. Toledo sabe cuáles son sus armas y las sabe utilizar con diligencia e inteligencia.

La voz gana enteros en las canciones acústicas

Para el segundo corte, el músico de Virginia escoge un formato de canción atípico. Beach Life In Death es un collage, una mini ópera rock más común en las tracks finales de decenas de discos, en plan relleno. Car Seat Head Rest la coloca donde quiere, pues no es espumillón musical, ni mucho menos. Se trata de una pieza coherente y bella que recuerda a algunos trabajos de Beck, aunque Will Toledo, pese a su juventud, atesora experiencia y conocimientos a la altura de compañeros más veteranos. Toda una osadía que sólo está al alcance de alguien que está muy seguro de lo que hace.

Stop Smoking (We Love You) es todo lo contrario que su predecesora. Corta, delgada y minimalista. En las sendas acústicas la voz de Will Toledo gana enteros y hace de la simplicidad un aliado incuestionable.

El gusto por la melodía edulcorada y suave continúa con Sober To Death. Aquí los coros nos llevan a cualquier rincón de California a montar olas con las que nunca te puedes hacer daño. Es la banda sonora perfecta para leer Vicio Propio de Thomas Pynchon.

De contrastes va la cosa. Buena noticia en este mundillo lleno de elepés de quince canciones que ya oíste en la primera pista. Los sintetizadores entran en la partida y suman potencia al discurso. Nervous Young Inhumans atesora una parte fuerte y atractiva a la que le pesa el puente hablado que le sigue hasta el final. No funciona excesivamente bien.

Bodys es puro imaginario de Will Toledo. La música, tal y como la entiende el norteamericano, se podría embotellar en esta canción, que sin ser la mejor de este Twin Fantasy, sí sirve como elemento catalizador de todo lo que desea expresar en este álbum. Los ingredientes son los siguientes: pop, rock, giros, aciertos y líneas rectas.

La obra más potente del plástico es Cute Thing. Con unos elementos que oscilan entre Nirvana y Weezer, pero con envoltorio de palmeras y vistas del Pacífico, Car Seat Headrest consigue una de las canciones más logradas y atractivas del LP.

Las sorpresas positivas no paran de sucederse. High To Death es una joya etérea, impalpable y volátil. Además de certificar que le gusta hablar de la muerte, mientras que otros coetáneos prefieren divagar sobre tecnología o bicicletas, este chaval también sabe ponerse el esmoquin y parir un tema elegante e hipnótico. Todo un lujo.

Es un álbum largo que no se hace largo

Famous Prophets continúa con esta tendencia que, si bien no consigue siempre una tendencia ascendente, sí que mantiene el nivel, que, a estas alturas, se puede definir como muy alto. Uno de los baluartes de Toledo es no hacer prisioneros con las estructuras de las canciones. Casi todas poseen un cambio de discurso dentro del discurso, una sorpresa que cambia el tercio de todo, como quien recorre un camino desconocido a tientas, sabiendo que lo que va a encontrar es agradable y bello.

El elepé se despide con un corte que da nombre al mismo. Perfecta despedida que aúna melancolía y virtud a partes iguales. Toledo acierta en poner este epílogo a Twin Fantasy, pues proyecta un viaje lejos de aquí, una cápsula de tiempo donde todo se detiene para regocijo de los sentidos.

Es un álbum largo que no se hace largo, sino que que se acerca a la épica de hacer pasar el tiempo a nuestro gusto, es extenso para quien quiera olvidarse de todo durante un buen rato, y se hace corto para el que sólo vaya en búsqueda de los setenta minutos que dura.

Más datos en https://carseatheadrest.bandcamp.com/album/twin-fantasy