Disco
En Casa del Herrero: 'Tradicción'
(Autoeditado, 2016)
Hoy os presentamos el tercer trabajo de En Casa del Herrero. 'Tradición' es un doble álbum que se compone de un primer disco con 11 temas propios, "Adicción", y un segundo con una docena de temas tradicionales interpretados en acústico por la banda que encabeza Eduardo Herrero a la voz, guitarra acústica, guitarra eléctrica y armónica
Carlos Clérins se ocupa de la guitarra eléctrica y acústica . Pepe Lamas se coloca al bajo y al contrabajo. De Jorge Quesada es el piano, el órgano y la guitarra acústica, mientras Óscar Quintáns se encarga de la batería y la percusión.
Adicción
- Don't you dare. Recuerda remotamente a algunas piezas de Bruce Springsteen. Música muy digerible que mantiene el ritmo.
- No tener más que perder. Con tonos más country, y definitivamente íntima, es una canción que sacudiéndose de empalagoserias, es romántica de verdad. El violín es una delicia. Toda la canción tiene algo de 'Los Secretos'
- Let's get married. Sin abandonar sus orientaciones al country, suena a amante que irrumpe en la boda y rapta a la novia en una furgoneta que se escapa hacia el horizonte levantando una nube de polvo.
- Road to ruin. Y aún en la carretera, pero con un tinte más sexy, las guitarras marcan un ritmo constante sobre el que la voz se desgarra lentamente.
- Tuve que probar. Más rock and roll, pero se termina volviendo muy convencional, la melodía se hace un poco repetitiva.
- Lighthouse on the Cliff. Se transforman en una balada, llena de pequeños adornos a la guitarra, y voces corales con un toque místico.
- Renglones torcidos. Tras una apertura absolutamente macarra, esta pieza se viste de blues castellano. Estupenda esa armónica final.
- Vals en capilla. El piano se pone elegante con este vals que desentona con el tono del disco. Recuerda a una nana de antes de dormir.
- We both know. La guitarra abre la pieza de forma encantadora con el piano entrelazándose con ella. Es una canción absolutamente solar y animada, y cuando acaba te sientes inevitablemente mejor que antes de que empezase.
- Boogie de una noche de verano. Parafraseando a Shakespeare, transforman su sueño en boogie, homenajeando en su estrofa inicial a la canción que se dividieron Sabina y Los Secretos.
- Duele. Una balada llena de despecho y desamor. No es muy original, no cuenta nada nuevo ni musicalmente (aunque el violín siempre mejora lo presente), ni especialmente, en la letra.
Tradición
- Take this hammer. Esta pieza harto interpretada por tantas bandas de bluegrass, además de los Beatles, se pone en marcha creando un ritmo electrizante desde el principio. El órgano se marca unas notas que coquetean con el jazz y le dan el toque final y propio a este hammer.
- Mirade para o meu pequeno. Adaptación gallega del tradicional Rough & Rocky. se basa en el poder de la guitarra acústica, en una canción delicada y melancólica.
- Diamond Joe. Country de Dylan, reinterpretado por En casa del Herrero, que incluye unas gaitas gallegas tan personales como apropiadas.
- I'm a man you don't meet everyday. Este tema tradicional de la música irlandesa que fue particularmente conocido por la versión The Porgues, tiene en esta pieza un toque mucho más íntimo, regado nuevamente por el sonido de las gaitas.
- No more Auction Block. Espantándole el polvo a otro viejo tema de Bob Dylan, se calzan a su manera esta canción sobre el esclavismo, mezclando una armónica que se pone a recordar 'Blowing in the wind' entre medias.
- The long black veil. Una pieza muy versionada, aunque sobre todo recordada por mister Cash, que habla de ese hombre condenado a muerte injustamente, que no puede defenderse porque la noche de los actos estaba acostándose con la mujer de su mejor amigo, y prefiere aceptar su muerte que confesar la verdad. La desgarradora letra hace juego con el tono que ha querido darle la banda.
- Hard times. Esta canción podría sonar fácilmente en el porche de una gran casa de Alabama. Quizá por eso han decidido dejarse ese comienzo bananero, de tacos, risas y chacharilla.
- Hallelujah I'm ready to go/Somebody touched me. Mezclando el gospel de Ricky Skaggs con el de The Cathedrals, hacen un auténtico ejercicio de síntesis al country.
- Lakes of Pontchartrain. Esta romántica balada americana sobre un hombre que se enamora de una bonita mujer creole de Louisana, comprometida con un marinero, ya fue versionada por el grupo irlandés Planxty. Ahora regresa con En casa del Herrero, que se tintan de azul.
- The wild Rover. Esta canción típica de irlandeses borrachines que berrean en los pubs, se representa aquí en un modo mucho más romántico de lo que probablemente haya sido jamás cantada. Mona, pero le faltaba cerveza.
- Dixie. Abren tambores de batalla en esta canción predilecta por los suereños durante la guerra de secesión de los EE.UU. Tiene los mismos aires de revolución que debió tener la original.
- The water is wide. Cierran el disco con esta pieza folk escocesa, que ha pasado por cientos de manos como las de Neil Young o Mark Knopfler. Con una medida sobriedad, las voces encandilan al oyente en una conclusión perfecta.
Aunque a veces la banda peca de ponerse un poquito pegajosa, en general el trabajo es exquisito, sobre todo en la parte de Tradición, donde consiguen infligirle su propio toque a estas canciones tan bien escogidas. Es una delicia recuperar piezas que son ya míticas, en los tonos calmos de En casa del herrero. Y es que en esta casa, el cuchillo es definitivamente de metal.
Texto: Maite Abascal
Más datos en http://encasadelherrero.bandcamp.com/album/tradicci-n-2016