El tercer trabajo de Jeff Rosenstock llega en el momento oportuno, justo cuando una pequeña ola deudora del indie noventero se cuela por los medios especializados. Nosotros no íbamos a ser menos, por eso os presentamos este Post-, un compendio de rock hecho con gusto y que cuenta con una joya en forma de canción.

El plástico lo abre USA, un vendaval perteneciente a esa época dorada norteamericana de la primera mitad de los noventa, y finales de los ochenta, cuando el rock alternativo todavía no era una etiqueta, como lo es H&M. Hablo de rock-pop con gusto por la melodía y evasivo en cuanto a efectos y sonidos “perfectos”. Este corte es sin duda el que abandera este Post-. Lo tiene todo: variedad, inteligencia, garra,... Todo lo bueno que pueden dar casi ocho minutos de canción.

Es inevitable bajar un poco el nivel cuando la génesis es tan buena. Yr Throat es la testigo de que Rosenstock ha escuchado mucho a bandas como Weezer y Guided By Voices. Este segundo tema es un resumen, volumen 1, de lo mejor de los noventa.

All This Useless Energy podría ser el volumen 2 de este compendio sónico de la última década del pasado siglo. Con un guiño a los Pixies, el exmiembro de Kudrow y The Bomb Music Industry! sigue desgranando un álbum homenaje a la cultura noventera y, en este caso, a su vertiente punk más comercial (sin ánimo de ser peyorativo).

El ramalazo punk a lo Green Day deriva sin demasiada gracia en Powerlessness. Doscientos segundos que no dan para mucho más. Sonríes un poco. No está mal.

El tercio cambia totalmente, y justo a tiempo, en TV Stars. La mesura toma el mando de un caballo que parecía desbocar. El suave piano a lo Beatles nos da la bienvenida para después dejarse acompañar por guitarras agresivas que dotan a este corte de una variedad que es de agradecer. Muy bueno el puente y la parte final.

Hace girar y retuerce la canción en ciertos momentos de manera brillante

Melba es otra pildorita pop-rock que demuestra que la capacidad media del neoyorquino es buena, aunque lejos de los momentos más brillantes, cuando Rosenstock se pone las pilas, o la musa le visita. Pero hay algo que sí sabe hacer el oriundo de Long Island, y lo demuestra en casi todas las canciones: hace girar y retuerce la canción en ciertos momentos de manera brillante. Sus decisiones dentro de la composición, una vez encaminada, siempre suman.

Beating My Head Against The Wall es una continuación de la anterior. De hecho hubiese funcionado mejor formando parte de su predecesora. Un disco no es mejor por tener más pistas. Las pistas las necesita un detective, no un LP.

Rosenstock vuelve a entrar en un tempo pausado, y la fórmula le funciona, aunque no tanto como en 'TV Stars'. Hablo de 9/10, otra minidosis de música amable. En el pop estas cantidades de melancolía suelen funcionar a las mil maravillas, y aquí lo hacen. No es un 9 sobre 10, pero está bien.

Un artista que aporta algo distinto a la cultura popular

El ocaso de este Post- es largo. Once minutazos dura Let Them Win. Pero la verdad es que el músico norteamericano se pierde entre tantas centésimas. La idea no da para tanto. A mitad de la pista comienza otra canción totalmente distinta y, poco después, otra. Rock, folk, ambient... Todo cabe en este final algo impostado, pero siempre agradezco los riesgos.

Tan sólo has de echarle un vistazo a la tele. Vuelves, cómo no, asqueado. Te pones los cascos y disfrutas, como en este caso, de 'USA', y te das cuenta de que hay que darle el valor suficiente a los artistas que apuestan por su camino, se equivoquen más o menos, pues aportan algo distinto a la cultura popular. Jeff Rosenstock es un ejemplo de ello.

Más datos en https://jeffrosenstock.bandcamp.com/